9 razones para entrenar la fuerza
En la última década se observa un cambio en el diseño de los entrenamientos, en los centros deportivos, por los profesionales de la actividad física. Sea cual sea el objetivo la respuesta por parte del profesional es la misma, hay que entrenar la fuerza. Son muy numerosos, y no paran de aumentar, los estudios que lo certifican.
Destacaremos 9 beneficios que tiene una práctica regular y bien diseñada del entrenamiento de la fuerza,
1. Mejora de la fuerza muscular Aunque parezca una redundancia no deja de ser la consecuencia más importante. El entrenamiento mejora el trabajo conjunto de los músculos (coordinación intermuscular). Además, los músculos aprenden, siempre que la intensidad del entrenamiento evolucione, a implicar cada vez un mayor número de fibras musculares (coordinación intramuscular). Esto se manifiesta en una mayor tonificación y ante todo un aumento de la masa muscular (hipertrofia). La hipertrofia depende mucho de las hormonas anabólicas, segregadas en mayor cantidad en los hombres, por ello es mucho más difícil, por no decir imposible, para las mujeres alcanzar niveles similares de desarrollo muscular.

2. Ayuda a perder grasa Con cada kilo más de masa muscular se aumenta notablemente el consumo de calorías durante las 24 horas del día. Por esta razón, las personas que entrenan la fuerza controlan mejor el peso y el porcentaje de grasa corporal. Es importante destacar que la medida del IMC (relación entre la estatura y el peso) está cayendo en desuso, las personas con bastante masa muscular pueden dar sobrepeso según la tabla de valor IMC. Lo realmente importante es la composición corporal.
3. Menos lesiones Una musculatura bien entrenada hará de armadura de nuestro cuerpo, protegiéndolo de golpes y caídas. Las articulaciones obtienen protección adicional cuando los músculos facilitan una movilidad equilibrada y compensan el peligro de sobrecarga.
4. Retrasa los efectos de la edad La masa muscular empieza a disminuir paulatinamente a partir de los 30 años en ausencia de un entrenamiento regular de la fuerza. Esta degradación no depende tanto del envejecimiento, sino que resulta sobre todo de la falta de entrenamiento. Un entrenamiento de la fuerza correctamente diseñado constituye la receta perfecta para contrarrestar los efectos del envejecimiento hasta edades avanzadas.
5. Huesos fuertes La osteoporosis, es decir, la falta de desarrollo o bien la degradación de la masa ósea, se está convirtiendo cada vez más en una enfermedad para la población general y no solo para las mujeres. Estudios actuales demuestran que la actividad física resulta decisiva en el desarrollo y mantenimiento de la masa ósea. Cuanto mejor se desarrolle la masa ósea en los 30 primeros años de vida mayor protección habrá durante años posteriores. En procesos de rehabilitación de lesiones el entrenamiento de fuerza es esencial para recuperar la densidad adecuada de masa ósea.
6. Ayuda a prevenir la diabetes A través del entrenamiento de la fuerza se obtiene una mejora de la sensibilidad frente a la insulina. Requisito esencial para el aprovechamiento regular del azúcar sanguíneo y, por tanto, es muy importante en la lucha contra la diabetes.
7. Consciencia del cuerpo
El trabajo intenso con el cuerpo también ejercita la percepción corporal. Durante el entrenamiento de la fuerza se tiene la opción de reconocer las señales del cuerpo y asimilarlas correctamente. Esto hace especial hincapié en la percepción del esfuerzo y el control del movimiento.
8. Cuida del corazón
Con el aumento de la fuerza, tanto los esfuerzos cotidianos como los deportivos resultaran más fáciles. Esto tiene especial interés para los personas con enfermedades coronarias ya que tardaran mas en llegar a sus límites de esfuerzo estando bien entrenados, significando un importante factor protector ante picos de esfuerzo del sistema cardiovascular.
9. Mejora de la autoestima y estado de ánimo
El entrenamiento de fuerza conlleva un apreciable cambio positivo en el aspecto físico que sumado a una mayor secreción de ciertas hormonas, provoca una mejora en la autoestima y estado de ánimo. Es un potente medicamento contra la depresión y el desánimo.
Es más que evidente que para gozar de una buena salud durante muchos años es imprescindible desarrollar y entrenar de manera adecuada y regular la masa muscular, ahora bien, me parece de vital importancia recalcar, como en anteriores artículos, que igual que un entrenamiento bien diseñado solo traerá beneficios una mala planificación puede acarrear problemas similares o peores que no hacerlos.
¡PONTE EN MANOS DE BUENOS PROFESIONALES Y CUIDA TUS MÚSCULOS!